La vuelta de las corridas de toros a Navalmoral llena los graderíos del multiusos

Y parece que existe a la vista de cómo estaban las gradas del edificio multiusos durante el festejo, con cerca de 3.000 espectadores de muy distinta procedencia, y del ambiente que se vivió alrededor del mismo y de los bares y restaurante que abrieron el domingo –al ser un día habitual de cierre-, frente a quienes se muestran contrarios a las corridas de toros.

«Me parece perfecto que no les gusten los toros, pero deberían respetar a quienes sí nos gustan», decía un aficionado en respuesta a las críticas que se han hecho en las redes sociales por la vuelta de las corridas a Navalmoral, que cuenta con la única plaza cubierta de Extremadura. Es más, el alcalde, Enrique Hueso, avanzó en la presentación del cartel que si la afición respondía, la intención de su equipo de Gobierno era promover más festejos

«Este cartel, nunca visto en Navalmoral, creará un precedente y si tiene la acogida que esperamos habrá más, ya que nuestra intención es apostar por este arte con una o dos corridas al año. Sin olvidar el componente económico, al acercarse ese día muchos aficionado de la comarca y de provincias cercanas», decía entonces e insiste ahora ante la respuesta encontrada, a la que no afectó la ausencia a última hora de Morante de la Puebla, sustituido por otro primer espada nacional, Sebastián Castella.

En cuanto a los trofeos conseguidos por los protagonistas, Castella cortó dos orejas y rabo y dio la vuelta al ruedo en el cuarto toro de la tarde; Emilio de Justo dos orejas y oreja y Tomás Rufo oreja en ambos astados. Todos de la ganadería de Alcurrucén.