El puente de la N-V deja espacio para la segunda vía del tren de altas prestaciones
Su demolición forma parte de los trabajos que se llevan a cabo este fin de semana para «adaptar la infraestructura de la red ferroviaria convencional al trazado de la conexión de alta velocidad»
El puente de la carretera Nacional V que salvaba las vías del ferrocarril junto al barrio de La Paz, al este del casco urbano de Navalmoral, ya es historia.
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Una historia que comenzó, con su construcción, a mediados del pasado siglo y que desde este sábado no es más que una montaña de escombros una vez completada su demolición, que resulta necesaria para dejar espacio a la segunda vía que llevará el tren de altas prestaciones.
Ocurrió en torno a las seis de la tarde, para disgusto de algunos nostálgicos del barrio, que reconocen sentir pena, ya que el puente formó parte de su paisaje diario en su infancia y juventud, y para malestar de los vecinos más próximos, situados a pocos metros de la vía, en la calle Azalea, que aseguran llevar varios días sin poder dormir dado que los trabajos para picar el hormigón y la piedra no se han interrumpido por la noche.
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