Los pasos a nivel que parten en dos el casco urbano de Navalmoral desde hace décadas, en la calle Pablo Luengo y junto al barrio de La Paz, ya son historia.
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Tal y como se había anunciado desde el Ayuntamiento se han cerrado definitivamente en la noche del miércoles, nada más terminar el Carnaval, para ser sustituidos, dentro de muchos meses, por dos pasos subterráneos peatonales
Pero mientras tanto, para entrar o salir del casco urbano, los viandantes tendrán que utilizar o bien la pasarela peatonal que se ha instalado entre las viviendas del silo y la estación de autobuses o el estrecho acceso peatonal del nuevo puente que salva la vía entre los barrios de Navarrosa y La Paz. Eso sí, sin las escaleras que aparecen en el proyecto para facilitar el tránsito de un lado a otro.
El cierre de los pasos se había fijado para las nueve y cuarto, pero la espera de un representante de ADIF para certificar lo que se estaba haciendo lo ha retrasado unos minutos, hasta cerca de la diez.
A partir de ahí se han clausurado, generando una nueva molestia para vecinos y visitantes, aunque como dice el Ayuntamiento con resignación «se trata de una intervención que requiere que todos nos adaptemos a los cambios en la movilidad».
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Unos cambios impuestos por ADIF, sin contar con la opinión de la ciudadanía afectada y sin pensar en aminorar las molestias que se están produciendo, sobre todo a los viandantes.
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