Hasta 15.000 chalecos amarillos han encargado los organizadores de la manifestación que se celebrará el sábado en Almaraz por la continuidad de la central nuclear.
Por una parte, para cumplir con los requisitos establecidos por la Delegación del Gobierno en Extremadura en materia de seguridad para autorizar la movilización, aunque vaya a realizarse por una carretera que se cerrará al tráfico, y por otra en previsión de los miles de asistentes que se esperan.
Ese y otros datos los dieron a conocer en la mañana del miércoles Fernando Sánchez Castilla y Patricia Rubio, integrantes de la plataforma 'Sí a Almaraz, sí al futuro', acompañados por Juan Antonio Díaz Agraz, alcalde de Almaraz, y Enrique Hueso, de Navalmoral, en la rueda de prensa que ofrecieron en La Inmaculada para insistir en la necesidad de participar en la protesta para hacer visible la postura de la comarca y detallar las numerosas gestiones que vienen llevando a cabo y los apoyos que están recibiendo.
Entre esas gestiones se encuentran reuniones con asociaciones y entidades de todo tipo, de dentro y fuera del entorno, dada la importancia que la actividad que genera la planta tiene para la economía de la región.
En cuanto a los apoyos, citaron a la Cámara de Comercio de Cáceres, la Sociedad Nuclear o los distintos ayuntamientos -algunos de cuyos alcaldes estaban presentes en el acto- que pondrán autobuses a disposición de sus vecinos para que asistan. Y no solo de la zona, porque también llegarán de Badajoz, Cáceres, Plasencia e incluso Cataluña.
El alcalde de Almaraz facilitó después algunos datos logísticos, como que la movilización se iniciará a las diez en la plaza, para marchar desde allí a la central por la carretera, que se cortará al tráfico.
También avanzó la presencia de personal municipal en los cruces en el casco urbano para repartir banderines y chalecos, esperando una afluencia masiva de «10.000, 12.000 o 15.000 personas».
«Si cae Almaraz, cae la comarca»
Por último, Enrique Hueso agradeció el trabajo que vienen haciendo la plataforma y los alcaldes del entorno e insistió en que «si cae Almaraz, cae la comarca». Pero también añadió un nuevo argumento para que siga funcionando más allá del año 2028, dejando claro, eso sí, que se trata de un «futurible», para no crear expectativas a corto plazo.
Se trata de los dos centros de datos proyectados por la empresa Merlin Properties en Extremadura, que ha elegido la región por su producción energética. Uno de ellos en Navalmoral por disponer de suelo, habiendo reservado ya una parcela de más de 100 hectáreas en expacionavalmoral, y por sus buenas comunicaciones.
«Estas instalaciones necesitan mucha energía, y cerca tendría una central nuclear con producción suficiente. No se entiende que en Estados Unidos se estén reabriendo centrales para alimentar los centros de datos de la Inteligencia Artificial y aquí se cierren sin justificación y causando un enorme daño económico a las comarcas en las que se ubican».
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