Menú de once euros para el Rey Felipe VI

No se puede decir que Felipe VI aprovechara su visita a Yuste para imitar a su antecesor, el Emperador Carlos V, famoso por sus comidas pantagruélicas y por las decenas de platos que se servían en cada una de ellas.

Los viajeros que transitaban por la Autovía del Suroeste e hicieron un alto para comer en el popular restaurante Puerta de Extremadura, en Calzada de Oropesa, se vieron sorprendidos el lunes cuando vieron entrar al Rey. Acompañado por el ministro Íñigo Méndez de Vigo, se acomodó en una mesa y se sirvió del bufet que se incluía en el menú, que ofrecía patatas con conejo o sopa castellana de primero; lengua de vaca o ternera, y postre. Él mismo se acercó a los mostradores para elegir los platos que iba a tomar, entre ellos una sopa castellana que tomó de una gran olla, cerveza y café solo.

El servicio de seguridad (el monarca estaba acompañado de una decena de personas), no permitió que se fotografiara al Rey mientras almorzaba, pero sí después. Acabada la comida, Felipe VI saludó y se fotografió con la cocinera y otros empleados. Un miembro del grupo pagó los doce menús, a once euros cada uno, que habían consumido y se marcharon.

«Como una persona normal y corriente», explicó a HOY por la tarde Flori, una de las empleadas del restaurante. El establecimiento ni siquiera estaba avisado de que iba a llegar el Rey. «Todo fue muy normal, como cualquier otro cliente», añadió Flori. «Nos saludó a las personas que estábamos. Yo ni me dí cuenta de qué era lo que comía».

Los problemas que había tenido por la mañana para llegar a Yuste en helicóptero aconsejaron a la comitiva real volver a Madrid en automóvil, para sorpresa del personal del restaurante de Calzada de Oropesa.