Milana Bonita plantea un nuevo subterráneo y un túnel bajo la Nacional V como mejoras del proyecto del tren

Así lo dicen en un escrito dirigido al alcalde los representantes locales del colectivo, «siguiendo la línea reivindicativa adoptada hace años en pro de la mejora general del ferrocarril y sus estructuras en Extremadura. En este caso nuestro objetivo es mejorar el paso futuro del ferrocarril en lo que afecta a nuestra ciudad en base a las declaraciones últimas del Ministro de Transportes, Óscar Puentes, tras la reunión mantenida con la presidenta de la Junta, María Guardiola, en la que expresó que el ministerio estaría dispuesto a mejorar la permeabilidad en el tramo de Navalmoral siempre que no supusiera retraso en las obras o modificaciones sustanciales del proyecto que se ejecuta».

Su primera propuesta es un paso peatonal en la calle Isabel La Católica para que los vecinos de esa zona tengan un acceso directo «y no el inconveniente de desplazarse hacia los pasos de Moya o del barrio de La Paz».

En su opinión, la circulación por la calle Cartagena no se vería afectada «porque seguiría pasando en superficie», mientras que el tránsito de vehículos por las calles Isabel la Católica, Hernán Cortés o Dalia hacia Cartagena se desviaría por la calle Hortensia hacia Genaro Cajal».

El segundo es un paso para vehículos y personas que cruce mediante un túnel la Nacional V, en la zona del nuevo puente del barrio de la Paz, para «dar continuidad a la calle Cartagena, siguiendo paralela a la vía y pasar por debajo hacia la otra parte de la carretera».

Las dos opciones, según recuerdan, ya fueron planteadas por Milana Bonita al ministerio en una reunión que mantuvieron en Madrid septiembre de 2019.

Actuar con celeridad

Para terminar, consideran que esta petición ha de ser estudiada por los técnicos de las administraciones implicadas, ver su viabilidad «y por supuesto consensuada. Pero entendemos que el Ayuntamiento debería realizar cuantas gestiones estuvieran en sus manos para que pudieran ser realidad las mejoras propuestas».

Eso sí, creen que los trámites necesarios deben hacerse «con toda la premura posible, dado el volumen que lleva la ejecución de las obras, pues de lo contrario se corre el riesgo de que cuando se consiga sea demasiado tardía su implantación».