Eloy García
Lunes, 25 de septiembre 2023, 09:30
La concentración de hallazgos relacionados con actividades artesanas y comerciales en una zona concreta del yacimiento arqueológico Madinat Albalat hace pensar en la existencia de un zoco en el seno del mismo.
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Esta es una de las principales conclusiones de la actual campaña de excavaciones en la otrora ciudad musulmana de Romangordo, ubicada junto al río Tajo, donde desde el año 2009 se vienen realizando trabajos para recuperar y consolidar los numerosos restos encontrados, coincidiendo con la temporada estival.
Al frente de las mismas se encuentra la arqueóloga francesa Sophie Gilotte, quién se muestra entusiasmada no solo por estos indicios, sino por el resto de descubrimientos realizados en las últimas semanas. «Ha sido un éxito, a pesar de las lluvias, que nos obligaron a parar, teniendo que trabajar después con mucho barro», manifiesta.
A solo unos días de la conclusión de la campaña (el miércoles finaliza), Gilotte hace un balance muy positivo, tanto por el resultado de sus trabajos como por el proyecto de vallado del yacimiento que ya ha sacado a concurso el Ayuntamiento de Romangordo.
Esta iniciativa es para la arqueóloga «un primer paso para la puesta en valor de Madinat Albalat», instando a que tanto las administraciones como posibles patrocinadores se embarquen en un proyecto para proteger y hacer visitable este yacimiento.
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Una condecoración
Los hallazgos han sido muchos. Desde una nueva cocina incendiada (rebosante de elementos bien conservados bajo las cenizas), piezas de cerámica, de vidrio (poco habituales por estos lares), tinajas, vajillas, grafitis en patios enlosados, ruedas de molino, nuevas viviendas, canalizaciones para evacuar aguas pluviales, zaguanes, una condecoración en forma de estrella de seis puntas o lo que parece ser un pozo, cuya excavación proseguirá en próximas campañas.
Gilotte hace hincapié en varias pesas de granito de cierta envergadura, utilizadas para pesar grano y otros productos orientados a su venta.
«Tenían que tener algún tipo de balanza para pesar y vender. Esto y más cosas, como indicios de actividades artesanas y comerciales, nos hace pensar en la existencia de un zoco. Y cerca de él una mezquita, pues se solían ubicar en las inmediaciones de estos recintos», subraya.
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Puertas abiertas
En cuanto a la jornada de puertas abiertas, celebradas el pasado día 16, explica que este año hubo menos visitas, a buen seguro por la amenaza de lluvia.
Por este mismo motivo se canceló la habitual teatralización que representa el día a día en uno de los hogares descubiertos, que suelen llevar a cabo por los propios voluntarios de las excavaciones.
Esto posibilitó que los improvisados actores siguieran con su cometido arqueólogo, por lo que el centenar de visitantes que se pasó por las mismas pudieron ver como desarrollan su labor y preguntarles 'in situ' sobre las mismas.
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Para concluir, señala que este año los más de veinte voluntarios -alumnos de arqueología y restauración)- han llegado desde diversas comunidades autónomas, como Andalucía, Galicia y Madrid, además de cinco extremeños, Francia, Portugal y Túnez.
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