
Tal y como adelantó HOY, cuatro jóvenes moralos, Víctor Martín, Paula Jiménez, Javier Miranda y Esther Almoharín, recibieron el martes, en el Teatro del Mercado, el reconocimiento a su esfuerzo, constancia y brillantez en el ámbito educativo. El primero, Premio Nacional a los mejores trabajos fin de Grado en Telecomunicaciones y premio del Colegio Oficial de Graduados e Ingenieros Técnicos en Telecomunicaciones. Los tres restantes como ganadores de los Premios a la Excelencia Académica 2019/2020.
La concejala del área, Patricia González -ante la ausencia de la alcaldesa por motivos de la salud- inició sus palabras insistiendo en el compromiso del Ayuntamiento con la educación.
«Sabemos que las competencias municipales en este campo son pocas, pero no obstante estamos realizando un esfuerzo material, económico y personal importante. Por la educación los hombres y mujeres acceden a lo que es más propio de la condición humana, la libertad, porque solo quien conoce puede valorar y solo quien sabe valorar es capaz de decidir lo mejor».
A partir de ahí presentó a los ganadores de los Premios a la Excelencia Académica entre los nueve candidatos presentados «todos con expedientes extraordinarios», y a quienes considera una «referencia» para los niños y jóvenes moralos. Son Paula Jiménez, que actualmente cursa Grado en Medicina; Javier Miranda (Ingeniería Matemática) y Esther Almoharín (Grado en Filología Clásica). Los tres, por cierto, fueron alumnos del IES Augustóbriga.
Los galardones los entregó el primer clasificado del curso anterior, Samuel Muñoz, quien dijo que es un premio al «esfuerzo y a la constancia», que hizo extensivo «a todos los que trabajan para hacer una sociedad mejor».
Después intervinieron las dos galardonadas, quienes también hablaron del esfuerzo y de las horas de estudio y dedicación, además de mostrar su agradecimiento a profesores y familiares. El tercero, Javier Miranda, no pudo asistir, por lo que lo recibió su madre, Ana Pascual, para quien era «un motivo de orgullo» y más en un curso con las dificultades que tuvieron que afrontar.
Premio Nacional
El acto lo cerró Víctor Martín, a quien el Consistorio quiso hacer un reconocimiento público por los premios nacionales e internacionales que ha obtenido por un trabajo compartido con José M. Taboada y Luis Landesa sobre liberación de las telecomunicaciones, que detalló.
Para el joven ingeniero era «un honor y un empujón muy grande para seguir adelante», destacando también el trabajo el equipo y el alto nivel de la Universidad de Extremadura, en la que aseguró sentirse como en su casa.
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