La Confirmación llena la iglesia de San Andrés

Tras la convivencia a Fátima, que fueron dos días de gracia y bendición, se intensificó la preparación de los confirmandos mediante los ensayos, celebraciones penitenciales, testimonios y sobre todo mediante la vigilia del jueves en la casa de la Madre, la ermita de Las Angustias, que se convirtió en un nuevo Cenáculo a la espera del Espíritu Santo.

Se han confirmado un nutrido número de adolescentes y de adultos en una ceremonia sobria y bien preparada dónde todos, confirmandos y fieles, tuvieron momentos de profunda oración y emoción.

La jornada terminó compartiendo un ágape fraterno en los salones parroquiales de San Andrés.

Don Ernesto, antes de regresar a Plasencia, quiso despedirse de la Virgen de las Angustias y conocer su ermita.