¡Basta ya de silencio! ¡Basta ya de indiferencia! ¡Existimos y exigimos!

¡Basta ya de silencio! ¡Basta ya de indiferencia! ¡Existimos y exigimos!. Así comienza el manifiesto reivindicativo que se ha leído en la tarde del lunes en la plaza de España con motivo del Día de la Fibromialgia y el Síndrome de Fatiga Crónica, seguido de una marcha por el centro urbano.

Y es que en su día internacional, el 12 de mayo, no piden permiso. «Alzamos la voz para reclamar justicia, respeto y compromiso. Somos las personas que convivimos con Fibromialgia y Síndrome de Fatiga Crónica. Somos quienes luchamos cada día contra el dolor, la fatiga extrema, la incomprensión y el abandono», sigue diciendo el escrito.

De ahí sus reivindicaciones: diagnósticos certeros, rigurosos y humanos; formación sanitaria obligatoria y específica, «porque la ignorancia médica no puede seguir condenándonos a la invisibilidad ni al descrédito»; tratamientos personalizados y multidisciplinares; acceso a servicios de apoyo psicológico y social continuado, «no como un privilegio, sino como un derecho»; investigación pública urgente «para encontrar respuestas que nos han sido negadas durante demasiado tiempo» y protección laboral efectiva, «porque trabajar no debe significar renunciar a nuestra salud, ni ser despojadas de nuestros derechos básicos».

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