Se autorizarán terrazas en lugares donde habitualmente no se instalan

Las terrazas, y con limitaciones, serán la única opción de negocio que tendrán en las próximas semanas bares y cafeterías ante las restricciones establecidas por el estado de alarma y la imposibilidad de consumir, todavía, en las barras. De ahí la intención del gobierno municipal de permitir su instalación en todos los lugares donde se soliciten y sea posible, aunque eso conlleve cerrar calles al tráfico o prohibir el estacionamiento de vehículos.

Así lo asegura, a preguntas de HOY, el portavoz municipal, y concejal de Seguridad Ciudadana, Pedro Fernández, quien en los últimos días viene recorriendo el casco urbano para hablar con los hosteleros interesados.

«Estamos viendo las posibilidades de colocar mesas y sillas y hablando con ellos de las recomendaciones sanitarias para echarles una mano en todo lo que necesiten. Y, por supuesto, aquellos que quieran abrir van a tener la disponibilidad de poner mesas en zonas donde habitualmente no se instalan porque en una situación excepcional como esta hay que echar una mano como sea».

Enclaves habituales de cañeo, como la Plaza Vieja, la Chimenea, el Pósito, Comillas, el Jardincillo, los Colorines, el peatonal o el paseo de la Estación, tienen más espacio para ello que locales ubicados en zonas sin plazas próximas, y que son los que más necesitarán esa colaboración.

De hecho, ante la salida de niños y paseantes en las franjas horarias, el Ayuntamiento ya limitó el aparcamiento en dos zonas que podrían utilizarse para las terrazas: desde el centro cultural La Gota hasta el inicio del peatonal o del final del peatonal hasta las inmediaciones de la Cruz de los Caídos.

Aunque todo esto se irá viendo en los próximos días, en especial el lunes, que es cuando algunos locales ya han avanzado su reapertura, frente a los que esperarán a finales de mayo o primeros de junio.

No se pagará tasa

Asimismo hay que recordar que a mediados de abril se anunció una modificación de la ordenanza correspondiente para no cobrar la tasa por ocupación de la vía pública a los establecimientos que saquen terrazas en lo que resta del 2020 y durante el 2021, para así colaborar en su recuperación tras casi dos meses sin actividad.