Una de las primeras medidas adoptadas por el reelegido alcalde de Romangordo, Evaristo Blázquez, al inicio de su nueva legislatura al frente del Ayuntamiento, ha sido emitir un bando alertando a la población sobre la escasez de agua, pidiendo la colaboración vecinal y anunciando la imposición de sanciones si fuera necesario.
En el texto recuerda que, especialmente durante los meses de verano, «queda prohibido el uso de agua potable para regar fuera del casco urbano huertos, jardines y olivares, llenar piscinas, tender mangueras que atraviesen las vías públicas o realizar enganches a la red general con el mismo fin y lavar automóviles y/o motocicletas o baldear agua en las vías públicas y todo uso innecesario».
Todo ello debido a la escasez de agua que «venimos acusando como consecuencia de la falta de lluvias y el agotamiento de los pozos de los que tradicionalmente se ha venido abasteciendo el municipio».
El alcalde añade que el bando se hace público con el fin de que todas las personas que vienen sembrando pequeños huertos en esta época se abstengan de hacerlo si no tienen más fuente de suministro de agua que la potable, ya que ésta es solo para consumo humano y animal.
«Tomemos conciencia de la importancia que tiene el agua, y más cuando aún no ha llegado el calor extremo del verano», afirma Evaristo Blázquez.
Actitud responsable
Por ello, el gobierno que encabeza espera la colaboración y actitud responsable de todos los vecinos y vecinas a fin de evitar la toma de decisiones «más drásticas» y la imposición de sanciones a quienes infrinjan las normas dictadas en el bando.
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