

Agustín Carreño se siente más cómodo haciendo política en la calle y hablando con la gente que en un ayuntamiento. De ahí su renuncia a la concejalía que ocupa desde el pasado 17 de junio por el grupo independiente Liberales y Moralos, según dijo el lunes el conocido médico jubilado al hacer pública su decisión.
«No hay nada extraño ni temas personales. Dejo el Ayuntamiento porque después de las circunstancias que he vivido en los últimos años prefiero estar en la calle, aunque eso no quiere decir que vaya a dejar el grupo, en el que he encontrado personas fuera de lo normal», insistió.
Estuvo acompañado por Francisco Fernández, Nuria Camacho y Roberto García, que será quien ocupe su puesto en el pleno, regresando así a la Corporación tras unos meses de ausencia. Recordamos que se presentó como número 3 de LyM, después de cuatro años como concejal del PP, y en mayo pasado se quedó a las puertas de repetir al lograr el partido de Jaime Vega dos ediles.
«Me voy alegre, igual que cuando entré en el 2008, habiendo crecido mucho como persona, pero no en el Ayuntamiento, si no en la calle, con la gente. Y cada día son más las situaciones favorables con las que me encuentro», añadió Carreño
Entre éstas destacó -«por casualidad, no porque estuviera preparado»- que en el mismo pleno en el que presentará su renuncia, el lunes 11, se aprobará restituir el nombre de la calle que otro pleno, en 2019, aprobó retirar a su padre, el exalcalde Agustín Carreño Camacho, y que los tribunales obligan a mantener tras aceptar el recurso presentado por la familia.
Coraje y compromiso
Antes de darse a conocer la renuncia de Carreño, Nuria Camacho insistió en la «valía, el coraje y el compromiso» de las personas que forman Liberales y Moralos, «como ya demostraron en la anterior legislatura (en el PP) y que van a mantener en la actual en dos líneas fundamentales». Por un lado, fiscalizar la gestión municipal y por otro «mejorar y avanzar» presentando propuestas, «como las que guardó la alcaldesa en un cajón y que Jaime Vega ya ha pedido al nuevo gobierno que se hagan realidad».
Para terminar, recordó que Roberto García es el «hombre de los números, con una firmeza en sus afirmaciones y en los análisis económicos que sonrojaron muchas veces al anterior equipo de gobierno».
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